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Diseño de iluminación arquitectónica: iluminar no es alumbrar
Los arquitectos carecen, en general, de las nociones básicas para trabajar la iluminación. A pesar de tratarse de una herramienta necesaria para proyectar espacios y trasladar su intencionalidad. ¿Por qué? ¿Y qué aporta la formación en diseño de iluminación arquitectónica de interiores?
¿Por qué el diseño de iluminación forma parte de la estrategia arquitectónica?
“Porque es la luz”, estúpido, se podría decir parafraseando el célebre “Its the economy, stupid”!”.
Integrar la iluminación en los proyectos de arquitectura en su fase más temprana contribuye a plasmar el concepto, voluntad o necesidad ideada por el arquitecto.
“No es lo mismo iluminar que alumbrar”, dispara Gisela Steiger, directora del curso Iluminación para arquitectos de la Escola Sert y fundadora y directora creativa de Fantastico Lighting Partners.
Una estrategía de iluminación debe concebirse en la fase conceptual de un proyecto. Sin embargo, lo más habitual es que se resuelva al final y reciba un tratamiento “funcional”.
Parafraseando ahora a Rosalía, “malamente”.
Steiger sitúa a la iluminación al mismo nivel que un revestimiento o la distribución de un espacio. “Responde a cómo un usuario se sentirá en aquel espacio. Por lo tanto, una estrategia de iluminación es fundamental porque es una de las herramientas para conseguirlo”, explica la experta en diseño de iluminación.
En un proyecto arquitectónico, la iluminación debe situarse al mismo nivel que el revestimiento o la distribución del espacio. (Fantastico Lighting Partners)
Una estrategía de iluminación debe concebirse en la fase conceptual de un proyecto
¿Cómo iluminar correctamente?
Una estrategia de iluminación debe tener en cuenta los siguientes puntos:
- Identificar puntos focales y dividirlos por zonas para entender dónde hay que iluminar y de qué tipo debe ser esta iluminación.
- Elegir el tipo de luz correcta, ya que no todas iluminan por igual ni tienen la misma temperatura de color.
- La elección depende de varios condicionantes como la altura, los revestimientos o la intencionalidad del espacio.
Cuatro puntos básicos a tener en cuenta en la iluminación arquitectónica
- No sobreiluminar los espacios
“Lo primero que hago como experta en iluminación es quitar luz. Parece una paradoja pero tendemos a sobreiluminar los espacios, apunta Gisela. Esto tiene consecuencias energéticas evidentes pero también repercute a nivel estético, ya que la luz solo debe colocarse donde la necesitamos”, afirma. - Evitar la luz que “dispara” desde el techo
Es una práctica muy habitual que, si nos paramos a pensar, es contraproducente: deslumbra y dirige la atención al suelo, un punto donde no es natural dirigir la mirada. En cambio, sí se recomienda para, por ejemplo, iluminar un espacio de trabajo o queremos enfatizar algún elemento. - Nunca hay que olvidar que la iluminación no es solamente una cuestión técnica, también es decorativa.
Aún así, además del diseño, deben considerarse factores como la difusión de la luz, si ésta será de 360º o más focalizada. - ¿Iluminación exterior o interior? No es lo mismo
Las ópticas, los ángulos y los accesorios para dotar de carácter a la luz son distintos según el espacio a iluminar, interior o exterior.
No es lo mismo iluminar un exterior que un interior de un edificio. (Fantastico Lighting Partners)
Normativa sobre iluminación: la magia se regula
La luz es magia, pero también tiene su normativa.
Gisela Steiger explica que existen ciertas cuestiones técnicas recogidas en varias normativas que generan cierta confusión pero que el curso se encarga de aclarar. Por ejemplo, cómo se calcula el volumen o cantidad de luz que hay que proyectar en, por ejemplo, una fachada.
“Este punto genera muchas preguntas: ¿cuál es el reglamento vigente? ¿Qué apartados de las normativas generales afectan al trabajo del lighting designer?”, plantea.
También distingue entre iluminar una tipología más común dentro de la arquitectura o un edificio patrimonial, ya que este último está sujeto a normativas más estrictas. Todo esto, apunta, se trata en el curso que dirige.
De hecho, sobre el curso que imparte Gisela Steiger, ni confirmamos ni desmentimos que al final de la formación, muchos profesionales declaren que, ejem, han visto la luz.
La iluminación contribuye a redondear el resultado de un buen proyecto de arquitectura. (Fantastico Lighting Partners)
Un especialista en iluminación debe trabajar codo con codo con el arquitecto
¿Qué salidas profesionales tiene la formación en iluminación arquitectónica?
- Para Steiger, formarse en estrategias de iluminación es un valor añadido, un plus que permitirá al arquitecto sentirse cómodo aplicando estos conceptos al inicio del proyecto.
- Especializarse como lighting designer y convertir a la iluminación en el epicentro de su carrera.
- Tener las herramientas para establecer un diálogo de tú a tú con fabricantes o proveedores de iluminación, ya que el catálogo de opciones es inacabable.
- Todas las tipologías arquitectónicas necesitan ser iluminadas: viviendas, hoteles, restaurantes, tiendas o fachadas.
Steiger explica que el especialista en iluminación trabaja codo con codo con el arquitecto que diseña y conceptualiza los espacios. “Necesitamos entender el concepto que va a proyectar para replicar su idea mediante la luz artificial”.
En lo que se refiere a la formación que dirige en la Escola Sert, ésta es sobre todo práctica. Se basa en casos de estudio y ejemplos prácticos que aplican conceptos que el especialista en iluminación se encuentra a diario y debe resolver.
La luz, algo tan cotidiano y complejo, también debe aprenderse y perfeccionarse para redondear el trabajo del arquitecto, dotar de carácter a los espacios y ayudar a que estos cumplan con la función para la que fueron concebidos.
¡Es la luz, arquitectos!
Lucía Burbano
Redacción Escola Sert
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