El arquitecto y la gestión de los Fondos Next Generation
Ya se ha adjudicado una primera partida del Plan de Rehabilitación y Regeneración Urbana resultante de los Fondos Next Generation EU. El objetivo de la subvención es ejecutar, entre otras medidas, obras de rehabilitación de edificios y viviendas particulares que mejoren la eficiencia energética. Pero este proceso plantea una serie de cuestiones para los arquitectos. ¿Cómo pueden intervenir los profesionales? ¿Es una oportunidad de liderazgo entre los agentes implicados? Repasamos estas y otras dudas.
El porqué de los Fondos Next Generation EU
El sector de la rehabilitación arquitectónica es uno de los más beneficiados de los Fondos Next Generation. Según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, los edificios representan el 40% del consumo de energía final de la Unión Europea. Esta cifra justifica su renovación como algo prioritario dentro de las estrategias europeas en materia de sostenibilidad.
El Gobierno aprobó una primera partida del Plan de Rehabilitación y Regeneración Urbana. Esta estrategia dispondrá de 6.820 millones de euros entre 2021 y 2023 para, por un lado, ejecutar obras de rehabilitación de edificios y viviendas particulares y, por otro, rehabilitar edificios públicos y construir nuevas viviendas sociales.
En este caso, nos centramos en el primer escenario, sobre el cual Escola Sert cuenta con un curso. Una formación enfocada a establecer una metodología clara y definida para encarar esta y otras subvenciones públicas denominado Técnico y gestor de rehabilitación energética. Herramientas de aplicación RD 853/2021.
Los proyectos de rehabilitación deben plantearse teniendo en cuenta nuevos elementos. (Unsplash)
El arquitecto debe reclamar una función doble: como mediador e interlocutor
Ricardo Alarcón, director del curso de Escola Sert especializado en explicar cómo acceder a las subvenciones y gestionarlas, avisa que “las condiciones energéticas serán exigentes”. También adelanta que para alcanzar los niveles de ahorro requeridos por Europa va a ser necesario actuar sobre la totalidad de la envolvente, no solo fachadas, sino también cubiertas. Estas obras ya no serán una mera rehabilitación, sino que suponen una “mejora, un aumento de prestaciones evidente y necesario”.
Suspenso generalizado en eficiencia energética
Catalunya y, en concreto, Barcelona capital y su provincia, cuentan con el parque de vivienda más antiguo de España, con una media de 57 años de edad, comparada con una media española que se sitúa en 45 años.
Esta antigüedad repercute en el aislamiento de los edificios y en la sostenibilidad. En España la calificación energética se indica con una gradación de letras que van de la A a la G, en que la media es la E, más cerca del suspenso que del sobresaliente. Como resultado, cada año se generan 29.000 toneladas de gases de efecto invernadero, alrededor del 14% de las emisiones totales.
Cada año se generan 29.000 toneladas de gases de efecto invernadero, alrededor del 14% de las emisiones totales. (Unsplash)
“En el contexto de los fondos europeos, no utilizaría únicamente el término rehabilitar, que viene a ser solo la recuperación de una función ya perdida, ya que estamos hablando de la necesidad y urgencia de mejorar la eficiencia de un parque de edificios existentes muy poco eficientes energéticamente hablando”, puntualiza Alarcón.
La intervención más habitual para lograr una mejora energética implica una serie de costes elevados para las comunidades de vecinos. El motivo es que hace necesario actuar sobre la totalidad de la “piel” del edificio, poniendo aislamiento térmico en fachadas, cubiertas e incluso cambiando o mejorando las ventanas existentes. “No basta con aislar únicamente la fachada. Será necesario hacerlo sobre la totalidad de la envolvente, incluyendo siempre la cubierta”, apunta el arquitecto.
La eficiencia energética, ¿un lujo social?
Además de la sostenibilidad, los Fondos Next Generation ofrecen la oportunidad para atajar un problema relacionado con la ineficiencia y que lleva años enquistado: la pobreza energética. Es el escenario que la Estrategia Nacional contra la Pobreza Energética 2019-2024 define como “la situación en la que se encuentra un hogar en que no pueden ser satisfechas las necesidades básicas de suministros de energía […], que puede verse agravada por disponer de una vivienda ineficiente en el ámbito energético”.
Una vivienda con una instalación inadecuada es más vulnerable a la pobreza energética. (Unsplash)
Las rehabilitaciones serán necesariamente de carácter “energético” y se premiarán las intervenciones que consigan un mayor ahorro
Según datos del Gobierno, entre 3,5 y 8,1 millones de personas, en función del indicador utilizado, se encuentran en situación de pobreza energética en España. Este escenario es especialmente preocupante en los grupos denominados vulnerables: los jóvenes, los inmigrantes, la tercera edad o las personas con discapacidad. Tradicionalmente, estos grupos han tenido además problemas para acceder al mercado inmobiliario, y estos fondos pueden ser el atenuante que mejore sus opciones.
Una de las medidas para paliar la situación descrita en el mencionado documento son “las rehabilitaciones exprés en viviendas, con determinadas medidas de bajo coste y rápida ejecución principalmente referidas a cambio de equipos térmicos y modificación de determinados elementos de la envolvente de la vivienda”.
“Los recientes diagnósticos han detectado las zonas donde se concentran estas situaciones y la Administración ya está actuando de manera tractora para impulsar la rehabilitación energética de este conjunto de viviendas”, explica Alarcón.
Los conocimientos técnicos de un arquitecto garantizan una correcta gestión de los fondos europeos. (Unsplash)
El papel técnico de los arquitectos en la rehabilitación energética
Para acceder a las subvenciones europeas debe presentarse una propuesta de rehabilitación que dé como resultado un mínimo del 30% de ahorro en el consumo de energía primaria no renovable. Cuanto mayor sea el ahorro, más aumentará el montante económico de la subvención.
Por eso, los conocimientos técnicos que tiene el arquitecto de las herramientas de rehabilitación y mejora de instalaciones son fundamentales. No solo para cumplir con el objetivo de descarbonización marcado por Europa, sino porque ello permitirá incluir otras obras no vinculadas.
Gestión y comunicación ejercida desde el liderazgo
En la concesión de un fondo de estas características intervienen varios agentes: comunidades de propietarios, administradores de fincas, financiadores públicos o privados. Por este motivo, resulta fundamental aclarar las tareas y funciones respectivas a fin de que el engranaje de todas estas piezas funcione a la perfección.
La gestión de equipos también ofrece herramientas interesantes para presentar proyectos alineados con los fondos europeos. (Unsplash)
En este caso, el cliente no es un individuo o una entidad, sino el conjunto de propietarios de un mismo edificio que buscan un interés común. En este escenario, el arquitecto adquiere un segundo rol, el de impulsor, frente a las administraciones, de diagnosticar y recopilar la documentación necesaria para tramitar y ejecutar esta rehabilitación energética.
En este contexto, el arquitecto emerge como un profesional capaz de liderar la rehabilitación residencial, a partir de una profundización de sus conocimientos en gestión y financiación que complementen su formación técnica de forma creativa y propositiva.
La metodología a seguir
Las rehabilitaciones, de acuerdo con el Real decreto, y para todas las obras que se quieran acoger a los programas de subvención en el futuro, serán necesariamente de carácter “energético” y premiarán con mayor subvención las intervenciones que consigan un mayor ahorro frente a las condiciones de partida.
Es bajo el paraguas de una actuación global con carácter energético que habrá que incluir las otras obras, de conservación y accesibilidad, para acogerse a los fondos de subvención existentes.
Cuanto mayor sea el ahorro, más aumentará el montante económico de la subvención. (Unsplash)
El curso de Escola Sert, en este sentido, pone énfasis en los contenidos que hacen referencia a la gestión y financiación, parte del contenido técnico. “El hecho de tener ya aprobadas las condiciones de ayuda que provienen de los Fondos Next Generation ha provocado que se plantee una metodología basada en cuatro puntos”, explica Alarcón:
- Contexto Fondos Next Generation: Rehabilitar desde el ahorro energético
- Certificación energética y justificación de subvenciones
- Aproximaciones de coste y financiación
- Herramientas de comunicación y mediación
“En estas sesiones contaremos con profesionales que trabajan en el ICAEN, la AHC o el ICF, que son los organismos que convocan las ayudas y definen los requisitos para acceder a ellas. Gracias a su experiencia, abordaremos de forma práctica cuáles son los errores comunes, las problemáticas concretas y los nuevos aspectos de los Fondos Next Generation”, especifica.
Las condiciones de las ayudas ya publicadas son fijas. “Esta propuesta de metodología surge a partir de las experiencias que ya tenemos en la relación con los organismos y entidades de certificación”, puntualiza Alarcón.
Lucía Burbano
Redacción
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El curso reconoce esta realidad y propone una metodología de actuación, basada en el análisis de experiencias de éxito en el sector y en las posibilidades y requerimientos del nuevo RD 853/2021.