El puzle de la arquitectura: la construcción industrializada como gran solución en sostenibilidad

La arquitectura industrializada como solución a la crisis social y medioambiental

Refugiados de guerra, emergencia climática, precariedad habitacional, mandatos europeos que exigen mejoras en la eficiencia energética de los edificios…Esta doble emergencia social y medioambiental reclama respuestas flexibles, ágiles e inmediatas, características que cumple la arquitectura modular, también denominada prefabricada o industrial.

Gerardo Wadel, profesor del curso Arquitecturas modulares aplicadas a la vivienda de la Escola Sert avisa de la importancia de impulsar la construcción modular lo antes posible: “No podemos cumplir con los compromisos adquiridos por España de rehabilitar 120.000 viviendas al año, porque con las tecnologías habituales se ejecutarían unos 30.000 o 40.000 proyectos al año. En cambio, el diseño modular permite una rapidez de ejecución mayor. Al tratarse de construcciones en seco fabricadas en el taller se pueden crear unos kits de elementos estructurales, de cerramiento o captación energética que se pueden vestir o desvestir de diferentes opciones materiales según la situación requerida”.

“Aunque tradicionalmente se ha asociado con la precariedad o las emergencias educativas y sanitarias, lo que enseñamos en el curso es que se puede practicar una arquitectura prefabricada de buena calidad”, afirma David Juárez, director del mismo curso. El diseño y ejecución de viviendas modulares ideadas por arquitectos como Jean Prouvé, Shigeru Ban y Kisho Kurokawa, entre otros, le dan la razón.

Juárez añade que también hay que disociar esta arquitectura de otros clichés, como una supuesta menor creatividad a la hora de proyectar. “Las reglas del juego son distintas. Entenderlas y aplicarlas enriquece el repertorio profesional. La arquitectura tradicional ya trabaja con elementos modulares como el pladur, el ladrillo o los bloques de hormigón y nadie cuestiona esa paleta de materiales”, defiende.

Las cualidades sostenibles de la arquitectura prefabricada

Otra de las ventajas de la arquitectura industrial es que apuesta por procesos circulares, tanto de los materiales que emplea como de su ensamblaje, y posterior desempeño energético.

“Por varios motivos, en los últimos años ha crecido la conciencia de que los medios materiales son limitados. Esto ha provocado un mayor desarrollo de la modularidad en la arquitectura que, unido a la evolución de tecnologías que permiten suplir la carencia que tenían algunas intervenciones pasadas, hace que esté muy en boga y tenga un futuro muy prometedor”, afirma Jon Begiristain, el tercer profesor del curso especializado de la Escola Sert.

Gerardo Wadel agrega que la aplicación de criterios medioambientales hace referencia al bajo impacto energético o tóxico en la fabricación de los materiales, que su origen sea la reutilización, como ya sucede en otros sectores como la aviación, la posibilidad de deconstruir y volver a construir una vivienda en otro lugar con una pérdida mínima de materiales, ya que actualmente con las tecnologías tradicionales, esta pérdida se sitúa en el orden del 25%-60%, mientras este modelo de gestión la reduce al 1% o el 3%.

“Este proceso ordenado permite la recuperación de los elementos en condiciones ya no de reciclaje sino de reutilización, que es un concepto que interesa más porque el reciclaje puede ser costosísimo, de un orden superior del impacto que tiene en la producción el uso de materias primas vírgenes”, asegura.

Tecnología y 3D en la construcción

Para Begiristain, la evolución de la tecnología suple las carencias que la arquitectura industrializada ha tenido históricamente, como la homogeneidad que anulaba una cierta singularidad arquitectónica. “La aparición de la modularización en 3D es muy importante porque eleva el nivel de prefabricado y de optimización, además de incidir en el diseño. Tal y como está planteado el curso, no se trata tanto del desarrollo sistemático de unas tecnologías sino en cómo éstas influyen en el diseño y ayudan a que los arquitectos tengan las herramientas para proyectar con la tecnología que mejor se adecua a sus necesidades”.

Wadel confirma que la tecnología por la tecnología o la industrialización por la industrialización “carece de interés”, ya que no se tratan de soluciones casi mágicas que resolverán, por definición, los problemas que tiene el sector de la edificación o el energético. “Lo que lo que justifica su uso es su intencionalidad, no el que se trate de una tendencia”, asegura.

Módulos constructivos: oportunidad de diálogo

La arquitectura por módulos tiene un importante componente off site, en el cual los distintos elementos se diseñan y fabrican en el taller para luego ensamblarlos en el lugar designado. Esta particularidad de la prefabricación puede generar, según Juárez, “un interesante diálogo entre los profesionales de la arquitectura, la industria y los clientes” sobre los distintos procesos involucrados.

En lo que se refiere al sector de la construcción, apunta Wadel, todavía queda resolver la reutilización de elementos como ventanas o una viga que previamente formaba parte de otro edificio “porque no se dispone de la certificación de calidad o la hoja técnica con las características de aquel elemento. Hay que avanzar muchísimo para equipar algo en lo que otras industrias ya es una práctica habitual”.

Tampoco, continúa Wadel, debemos pensar en la arquitectura modular como en una concentración de grandes empresas con sistemas rígidos. “Estos pueden ser flexibles y pueden proceder de la economía social solidaria, de pequeñas y medianas empresas e involucrar a los grupos a los que puede destinarse mediante procesos participativos” opina.

En los países del norte de Europa no es extraño observar cómo módulos prefabricados han sido añadidos a viviendas tradicionales, una muestra de que las posibilidades de la industrialización en la arquitectura no tiene límites, siempre que exista la intencionalidad

Paso a paso, pieza a pieza, se pueden poner las bases para una arquitectura más sostenible, energéticamente eficaz, más rápida en su ejecución y más económica.

Lucía Burbano
Redacción Escola Sert