Sesión Sert | NeuroArquitectura Revelada: Descubriendo el Impacto de los Espacios Construidos en el Cerebro Humano
Presentación
La clase "Efectos a Corto y Largo Plazos de la Arquitectura en el Cerebro: Hacia una Formalización Teórica" explora el fascinante campo de la neuroarquitectura, definida como la aplicación de la neurociencia en los espacios construidos para comprender mejor el impacto de arquitectura en el cerebro y el comportamiento humano.
Este enfoque interdisciplinario amplía la investigación sobre la relación entre los entornos construidos y los usuarios, integrando la neurociencia aplicada. A diferencia de la Psicología Ambiental, la Neuroarquitectura utiliza la neurociencia para comprender de forma más completa el funcionamiento del cerebro y las reacciones fisiológicas del organismo ante estímulos ambientales.
La neuroarquitectura aborda diferentes niveles de estudio, desde el molecular y celular hasta los sistemas y comportamientos, buscando comprender cómo el entorno físico impacta a los individuos. Se estudian desde la liberación de sustancias químicas como hormonas o neurotransmisores hasta expresión génica, plasticidad cerebral o alteración de estados mentales, percepción, emociones y comportamientos.
Un aspecto fundamental es que la neuroarquitectura asume que el entorno influye directamente en los patrones más primitivos del funcionamiento cerebral, que escapan a la percepción consciente. Los arquitectos pueden diseñar espacios con el objetivo explícito de afectar a comportamientos humanos, incluso aquellos más allá de la percepción y el control consciente.
Es esencial comprender que, aunque la neurociencia revela varios patrones de funcionamiento cerebral, las personas siguen siendo únicas debido a la influencia de la genética, la cultura y las experiencias individuales. Por tanto, el mismo entorno puede tener efectos diferentes en personas diversas, destacando la importancia de comprender el público objetivo en el diseño de un entorno.
La neuroarquitectura reconoce que el entorno físico no es la única variable que afecta al funcionamiento cerebral y al comportamiento. Características personales, el entorno social, hábitos y rutinas son ejemplos de otras variables que también pueden influir en cómo las personas reaccionan en el entorno. Cada entorno debe tener características que estimulen comportamientos y actividades específicas, como la creatividad, la concentración, el aprendizaje, la socialización o la relajación.
Desde un punto de vista práctico, la neuroarquitectura se utiliza para que la acción humana sea más efectiva y, sobre todo, para crear espacios más saludables a corto y largo plazo. El principio rector de la Neuroarquitectura es "eficiencia con calidad de vida y bienestar personal".
La duración y frecuencia de la exposición de los individuos en el entorno físico pueden impactar en los efectos que genera en el organismo, la percepción y el comportamiento. Los entornos a largo plazo requieren una atención especial, ya que tienen mayores probabilidades de generar efectos duraderos, como cambios plásticos en el cerebro.
La ética juega un papel fundamental en aplicar la neurociencia en la arquitectura, ya que los entornos construidos pueden influir en los usuarios sin que se den cuenta. Los principios éticos son de gran relevancia en todas las áreas de la neurociencia aplicada.
Es crucial aplicar la neurociencia en la arquitectura con precaución, puesto que el cerebro y sus mecanismos son extremadamente complejos y el conocimiento en este campo avanza constantemente. Los arquitectos y diseñadores deben mantenerse actualizados utilizando fuentes de información fiables para evitar conclusiones cuestionables.
La neuroarquitectura no consiste en la creación de reglas específicas que los arquitectos deben seguir al diseñar. En cambio, se trata de un conjunto de conceptos que involucran a diferentes propiedades cerebrales que pueden ser impactadas por ciertas características del entorno. Los arquitectos y diseñadores tienen la responsabilidad de elegir qué, cuándo y cómo aplicar estos conceptos.
En esta clase de 90 minutos, exploraremos los fundamentos y aplicaciones prácticas de la Neuroarquitectura, analizando cómo la conexión entre el cerebro y el entorno construido puede dar forma a la experiencia humana y contribuir a la creación de espacios más saludables y eficientes.Final del formulario.
Objetivos
Integrar conocimientos neurocientíficos en la creación de espacios con fines específicos:
- Diseñar entornos que promuevan el bienestar a corto y largo plazo.
- Investigar y aplicar recientes descubrimientos en neurociencia en la práctica arquitectónica.
- Desarrollar habilidades críticas para evaluar la relación entre arquitectura y comportamiento humano.
Destinatarios
El curso está destinado a profesionales de la arquitectura, diseñadores, urbanistas y aquellos interesados en integrar los principios de la neuroarquitectura en la creación de entornos que favorezcan el bienestar y la eficacia humana.
Este curso también está abierto a profesionales de la salud mental que quieran explorar cómo la neuroarquitectura puede influir en el bienestar psicológico de los individuos a través del diseño de entornos terapéuticos.
Ponente
Koncha Pinós
Neurocientífica y directora y cofundadora de The Wellbeing Planet.